"PONIENDO LA FE EN EL BAUTIZADOR, NO EN EL BAUTISMO"
UN BREVE TESTIMONIO ANTES DE EMPEZAR CON DOCTRINA BÍBLICA
"¿Soy yo su hermano en Cristo, sí o no?", preguntó el Dr. Walter Martin en un debate con los representantes de la Iglesia Pentecostal Unida Nathaniel Urshan y Robert Sabin, que fue parte del Show de John Ankerberg en el 1985. Y mientras yo me senté y observé al hermano Urshans flaquear en dar una respuesta directa a la pregunta, mi mente vagó en desmayo al hecho de que mi propio superintendente no contestara NO, USTED NO ES MI HERMANO EN CRISTO. Esa sería la respuesta común de cualquier adherente al unicitarismo a un creyente trinitario.
Intento compartir mi experiencia en la Iglesia Pentecostal Unida. Las intenciones de este artículo no es avergonzar a los creyentes unicitarios, pero mas bien ayudar a los creyentes de la iglesia cristiana de los peligros de los movimientos legalistas hoy día.
Yo me crié en las Asambleas de Dios. Mi madre, quien era católica, tenía intenciones de enviarme a la iglesia católica. Mi padre, quien era protestante, no le permitió a mi mamá enviarme a la iglesia católica. En vez, él me envió cada domingo con sus padres a la escuela dominical de la Iglesia Asambleas de Dios. Mi padre y mi madre nacieron de nuevo varios años después, y atendimos una Iglesia Pentecostal en una ciudad cercana. Me involucré en la iglesia y vi a 15 de mis compañeros de clases salvarse. Para ese tiempo yo tenía 15 años. En la escuela conseguí amistades que iban a la Iglesia Pentecostal Unida de la ciudad. Tuvimos inminentes discusiones sobre la divinidad y el bautismo en aguas. Después de muchos vigorosos intentos de contestar las afirmaciones de los unicitarios y las muchas escrituras en torno al bautismo en aguas, me persuadieron de su teología, y fui al extremo de dudar de mi salvación.
Me puse furioso y resentido con mis padres, mi pastor y los maestros de la escuela dominical de quienes creí que me guiaron en error desde niño. En la IPU (de ahora en adelante la Iglesia Pentecostal Unida será nombrada de esta manera, IPU) me enseñaron que la doctrina de la Trinidad era en verdad una creencia en 3 Dioses. Ellos también me enseñaron que había sido bautizado de la manera equivocada. Ellos insistían en que el nombre de Jesucristo debe ser dicho sobre un individuo y que aquellos que se bautizaron en el nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo habían sido erradamente bautizados. Ellos también me pidieron que les muestre en la Biblia a alguien que había sido bautizado en la formula trinitaria e insistieron en que cada instancia del bautismo bíblico paso en el nombre de Jesús (esto es, el nombre a ser pronunciado sobre ellos).
Muy pronto les dije a mis padres de mi decisión a asistir a la IPU. Ellos se opusieron a mi decisión. Para este tiempo ya yo había ido a la IPU varias veces sin el consentimiento de mis padres. Cuando se dieron cuenta de mis excursiones se preocuparon. Después de varias visitas, decidí bautizarme en la manera correcta para asegurarme que era salvo.
Porque mi asistencia a la IPU fue en contra de la voluntad de mis padres, me fui de la casa a los 16 años. Como resultado de esto, me encontré viviendo en casa de diversos miembros de la iglesia. Tres meses más tarde, me pusieron en la plataforma con propósitos de predicación.
Fui fuertemente adoctrinado con varios libros y material publicado por la IPU. Dedique gran parte de mi tiempo a escuchar debates entre unicitarios y trinitarios. Aprendí las respuestas de los unicitarios a la teología trinitaria, y me torné dogmáticamente opuesto a los trinitarios. En agosto del 1989, luego de ser parte de la junta ministerial de la IPU local, la organización me ordenó al ministerio. Comencé un ministerio en las cárceles en las cuales unos 75 prisioneros fueron bautizados en 2 años. Era muy celoso con las actividades de la iglesia.
Estaba muy familiarizado con el Dr. Walter Martin y obtuve un gran número de sus escritos y cintas. Aunque no creía que él era salvo en ese momento, admiraba su conocimiento en el área de religiones comparativas (apologetica). Cuando escuché que el Dr. Martin murió en junio de 1989, fui a su servicio memorial en el área de baja de California. Durante su servicio memorial, fui movido por los comentarios de varios individuos en torno a su persona, y estaba batallando en mi mente cómo si yo consideraba a este hombre perdido y en error, su vida y ministerio habían ayudado a tantos miles a través de los años. Aun no me podía comprometer con lo que yo creía que era la única verdad.
Me prestaron un video del debate mencionado arriba que tuvo lugar en el programa de John Ankerberg ("La Trinidad de Dios: ¿Qué enseñan las Escrituras?"). Mi primera impresión del debate me dejó bien desilusionado. El Dr. Martin y Carl Beisner fueron muy profundos en su presentación y la defensa de la ortodoxia cristiana, mientras en mi soberbia opinión, la oposición tiró una muy pobre defensa de la teología unicitaria. Y para más efectivamente investigar y presentar las doctrinas unicitarias, comencé a investigar mis trabajos en el área de la historia de la iglesia y estudios de palabras en hebreo y griego. Para mi sorpresa, descubrí varias interpretaciones fallidas de la historia de la iglesia en la enseñanza de la IPU. Había también un sinnúmero de discrepancias gramaticales de algunos pasajes claves que habían pasado sin notificar y que de hecho se usaban para distorsionar el significado dentro del contexto del pasaje.
Durante el último año de mi envolvimiento con la IPU, analicé las enseñanzas de mi iglesia local. Fuimos enseñados por nuestro pastor que él iba a responder por nosotros en el día del juicio concerniente a nuestras vidas y experiencias personales con Dios. Fuimos enseñados a que si faltábamos a un servicio, íbamos a dar cuenta a Dios del por qué lo perdimos. Fuimos desmotivados a atender reuniones familiares en una noche de culto. Cuando se deseaba hacer eso, miembros nuevos y viejos, teníamos que pedir permiso al pastor. Mas usual que no, la respuesta era que no podíamos ir. ¿Dónde están sus prioridades, hacia Dios o hacia su familia?, solía preguntar él. Esto engendraba un sentimiento de culpa en los miembros de la iglesia. Las Escrituras eran manipuladas y efectivamente usadas para intimidar a los miembros que consecuentemente no tenían derechos ni razones que dar. El pastor siempre estaba en lo correcto, porque él se proclamaba a sí mismo "el hombre de Dios" y no podía ser cuestionado.
En mi experiencia, atendía el servicio memorial de un familiar. Fui cuestionado por el pastor que si era realmente necesario para mí el atender el memorial, pues era noche de culto. El me contesto que dejara a los muertos que enterraran a los muertos. Sin necesidad de decirlo, fui al culto esa noche. Luego me encontré con que él no sólo manipuló las Escrituras, sino que obligaba a la gente con esto y actuaba como un dictador.
Hay muchos extremos de legalismo existiendo en la gran mayoría de iglesias IPU. Los hombres no son permitidos a tener bigotes, y las mujeres no son permitidas a cortar su cabello. Ni tampoco podían usar mangas en sus blusas más arriba de sus codos. Estos son considerados estándares de santidad. La televisión está desaprobada desde que fue considerada una vía del infierno en el hogar. Al violar estos estatutos, un miembro puede ser considerado rebelde y desobediente a la Palabra de Dios, no sin mencionar a su Pastor. Se tornó una salvación por obras en vez de por gracia. Si una persona no sigue estos estatutos, no hay posibilidad de que sean salvos. La iglesia está gobernada por un fariseísmo moderno.
Mirando atrás, puedo ver las ataduras de la gente causadas por un derecho propio, que pueden demarcar por su apariencia santurrona. Se hizo, como dice el Apóstol Pablo, una apariencia de piedad - 2da. Timoteo 3.5.
Otro incidente me afecto: Diferentes personas de nuestra iglesia local se fueron a otra iglesia del movimiento IPU, y fueron informalmente expulsados por esto. Éramos enseñados a atender la iglesia en la cual nos salvamos. Si alguien se iba de la asamblea local para atender otra iglesia unicitaria, se les consideraba rebeldes, asimismo como perdidos, y por eso eran expulsados de la IPU.
Yo sabía que esta enseñanza no era ni lo más remotamente bíblica. Por esto, comencé a profundademente a reexaminar las enseñanzas de la iglesia. Estas y otras situaciones me aprontaron a estudiar las enseñanzas de la iglesia en un todo. Le pregunté a un amigo mío (quien fue expulsado por atender una IPU cercana) que de nuevo revisáramos el debate de Ankerberg, esta vez, con corazones y mentes abiertos e intenciones sin prejuicios.
Todas las evidencias dadas por Marin y Beisner eran irrefutables. Verificamos todos los pasajes que ellos dieron y encontramos que eran correctos y sin errores. Martin explico varios de los pasajes dados por los representantes de la IPU. Por ejemplo, en Juan 10:30 Jesus dijo que Yo y el Padre somos uno. Y Martin trajo el verso en el original, en griego, que dice que estamos unidos, ver una traducción bíblica en este pasaje para la palabra griega ESMEN que se traduce SOMOS. Deuteronomio 6:4 tambien fue citado. Martin y Beisner de nuevo explicaron que la palabra del hebreo para este pasaje es ECHAD, que quiere decir que son una unidad compuesta.
Finalmente, al final del programa Martin le pregunto al Nathaniel Urshan si todos esos que habían sido bautizados en la fórmula trinitaria estaban perdidos y se iban al infierno. Urshan expresó su inseguridad con una respuesta vacilante. Mi estómago se viró al revés porque su respuesta debió ser un enfático ¡SI!, todos están perdidos y se van a perder en el infierno. La IPU enseña enfáticamente que uno debe ser bautizado con el nombre de Jesucristo pronunciado sobre uno. Aun más, que uno debe hablar lenguas y que esto es evidencia sustancial para demostrar la llenura del Espíritu Santo. De otra manera, no se puede ser salvo. Además, los miembros deben seguir el legalismo enseñado en sus iglesias, afeitándose el bigote o usando mangas más abajo del codo y así por el estilo. Esta doctrina es completamente contraria al concepto de la salvación por gracia.
Yo estaba pensando en continuar con la IPU o desasociarme. Decidí esto un mes más tarde al entregar mis licencias de ministro de la IPU. Al principio me cuestioné mi decisión. Yo sentí como si mi alma estuviera en peligro. Pero no podía tornar atrás la evidencia escritural. ¿A quién debía escuchar, a la IPU, a mi pastor? ¡NO! ¡A la Palabra de Dios! La Biblia es clara en Efesios 2:8-9 que por Gracia somos salvos a través de la fe, y no por nosotros mismos, ya que esto es un don de Dios: no por obras, para que nadie se gloríe.
Yo no puedo negar el fruto del Espíritu que vi en otros cristianos que no eran IPU. Esto comenzó a traer testimonio a mi espíritu y en consecuencia a trabajar con mi consciencia vagabunda. Yo aprendí la lección valuable que el amor de Dios es incondicional. El pastor local de la IPU les enseño que no podían entrar en contacto con los miembros que se iban de la iglesia. Después de irme de la iglesia, fui marcado como alguien fuera de territorio a la membresía local y considerado que alcance un estado reprobado. Deduje por esto que su amor por mi y otros miembros era pura y inequívocamente condicional. La Biblia nos exhorta a escudriñarlo todo, retener lo bueno y desechar lo malo-1ra. Tes. 5.21. Aun el Apostol Pablo dice en 1ra. Cor. 10.15 que juzguemos nosotros mismos lo que yo digo-haciendo una referencia a su persona, hablando en primera persona singular. Primera de Juan 4:1 dice que Amados, no le crean a todo espíritu, pero prueben los espíritus a ver cuáles son de Dios, porque falsos profetas han salido al mundo. Finalmente, debemos hacer como los bereanos en Hechos 17:11, que escudriñaron las Escrituras diariamente, para ver si estas cosas eran así.
Si usted está en una IPU o en otra forma de movimiento legalista, y esta turbado por lo que ve, no tema por levantarse por la verdad.
Los miembros de la IPU local que asistí ven a su pastor como una figura autoritaria. Los miembros no podían cuestionar su postura en un asunto en particular, por miedo a ser marcados. Los miembros no podían ir de vacaciones o perder un culto sin el permiso de los pastores. El se hizo un dictador y les gobernaba en todo con autoridad infalible. La Biblia no apoya esto-ver Mateo 20:25-27, 1ra Pedro 5:3. Si esta es la situación en la que usted se encuentra, y desea salir, hay esperanza para usted. Yo comencé a ver la actitud general de la IPU como un todo, similar a la de los Fariseos de el Nuevo Testamento. Tenían apariencia de piedad ante el hombre por su santurroneria, pero por dentro estaban corruptos y podridos-ver más en Mateo 23.
Ahora que estoy fuera de la IPU, he encontrado la verdadera libertad en Cristo. Mi identidad está ahora con el bautizante, y no con el bautismo. Mi oración sincera por esos que están atrapados dentro de estos movimientos legalistas, como la IPU, es que salgan y experimenten la verdadera libertad en Cristo, y que en busca de la verdad, ellos le conozcan verdaderamente a Él, que es la Verdad. Si desea preguntarme algo sobre mis experiencias antes y después de mi decisión de salir de la IPU, por favor, no duden en escribirme a la siguiente dirección:
Pastor David Vivas, Jr. P.O. Box 250 Delano, CA 93216 E-mail: worldharvestintl@yahoo.com
¿PASTORES UNICITARIOS INFILTRADOS EN LA IGLESIA?
T.D. Jakes: ¿Un falso maestro?
por Pablo Santomauro
Mucha gente admira a T.D. Jakes. Francamente, yo puedo entender eso. Un gran número de cristianos son infantiles en la fe a pesar de haber sido salvos (esperamos) por mucho tiempo. Es un triste espectáculo verlos aun con su biberón y sus pañales. Por ello es que siguen a T.D. Jakes, el "predicador" que vive en la opulencia y se codea con falsos maestros de la categoría de Marilyn Hickey, Joyce Meyer, Roberts Liardon, Benny Hinn y
otros. Jakes dice que Jesucristo era rico - por aquello de que alguien le recrimine que conduce un Mercedes Benz nuevo y vive en un palacio que cuesta millones. El mensaje que predica es una versión psycho-freudiana con matices de Nueva Era, el pecado es raramente mencionado por su nombre, y el evangelio de la prosperidad y el positivismo es su distintivo mayor.
Pero el objetivo de mis palabras de advertencia en esta breve perspectiva tienen que ver con la defectuosa doctrina de Jakes en cuanto a la naturaleza de Dios. T.D. Jakes profesa una teología modalista, i.e., confiesa que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo no son tres distintas personas, sino tres modalidades, roles o funciones. Durante una entrevista de radio se le pidió a Jakes que opinara sobre la doctrina de la Trinidad, y él respondió:
- "La Trinidad, el término Trinidad no es un término bíblico, para comenzar. Es una descripción teológica para algo que está más allá de la comprensión humana, tanto que no estoy seguro que nosotros podamos definir a Dios con un sistema numérico. El Señor dijo, ‘Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es, y no hay otro". Cuando Dios decidió crear un hombre que se pareciera a El, no creó tres. El creó un hombre. Sin embargo, ese hombre tuvo tres partes. El era cuerpo, alma y espíritu. Tenemos un Dios, El es Padre en la creación, Hijo en la redención, y Espíritu Santo en la regeneración. Es muy importante que entendamos eso, pero yo pienso que lo primero que todos los creyentes necesitan es acercarse a Dios por fe, y entonces, habiéndose acercado por fe, entonces ellos necesitan sentarse a escuchar una buena enseñanza para entender quién es ese Dios en quien han creído". (Viviendo en la Palabra, KKLA radio, conducido por John Coleman, Agosto. 23, 1998 - cit. http://www.letusreason.org/popteac9.htm
Comentarios nuestros:
Las palabras de T.D. Jakes fueron exactamente una copia carbónica de lo que el hereje Sabelio dijo en el tercer siglo. Me refiero a "Dios revelado como Padre en la creación, Hijo en la encarnación, y Espíritu Santo en la regeneración y santificación" (Jakes omitió la palabra ‘santificación’).
La website oficial de la Iglesia Pentecostal Unida (modalistas por excelencia) declara en su portada exactamente lo mismo con palabras similares. Traduzco del inglés: "Por lo tanto, Dios se manifiesta como Padre en la creación y como el Padre del Hijo, en el Hijo para nuestra redención, y como el Espíritu Santo en nuestra regeneración" (http://www.upci.org/about.asp).
Volviendo a la declaración radial de Jakes, el lector habrá notado que él utiliza la ilustración de las tres partes del hombre, cuerpo-alma-espíritu. Comparar los componentes del hombre con las tres personas de la Trinidad es caer en la falacia de la falsa analogía (o de categoría). Las primeras son partes y las segundas son personas. Como si esto fuera poco, la ilustración de Jakes, de ser tomada en serio derrota su propia posición, ya que las tres parte existen simultáneamente mientras que Jakes dice que Dios cambia sus roles o funciones alternativamente para relacionarse con el hombre.
La revista académica The Christian Research Journal, publicada por CRI (Christian Research Institute) publicó hace años un artículo criticando la teología de T.D. Jakes. Luego de un tiempo, la revista Christianity Today le permitió a Jakes aclarar su posición en la Trinidad al publicar un artículo de su misma autoría (My Views on the Godhead, Feb. 1, 2000, christianitytoday.com/ct/2000/februaryweb-only/13.0b.html).
T.D. Jakes escribe:
- "Yo creo en un Dios que es el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Yo creo que estos tres tienen distintas y separadasfunciones, tan separadas que cada uno tiene atributos individuales, pero sin embargo siguen siendo uno. Yo no creo en tres Dioses. Muchas cosas pueden ser dichas del Hijo que no pueden ser dichas del Padre. El Hijo fue nacido de una virgen; el Padre creó la virgen de la cual el Hijo fue nacido. El Hijo dormía (Lucas 8:23), pero el Padre nunca duerme (Salmo 121:3-5). El Hijo fue hecho en semejanza de carne de pecado (Romanos 8:3), pero Dios es espíritu (Juan 4:24). A pesar de todas estas distinciones, Dios es uno en esencia ... " (resaltado nuestro)
Nuestro análisis:
Las palabras de Jakes parecen ser cuidadosamente seleccionadas para mimetizar su verdadera posición sobre la Trinidad. A pesar de ello, ciertas expresiones dejan entreveer su sesgo teológico hacia la posición modalista (o unicitaria):
- El uso del término "funciones", que si bien puede ser ambivalente (se puede usar tanto para explicar la Trinidad como el modalismo), parece ser una palabra favorita de los unicitarios.
- La frase "Yo no creo en tres Dioses" es marca registrada de todo antitrinitario. Los trinitarios hemos dicho hasta el cansancio que creemos en un solo Dios, no tres. La frase de Jakes toma connotaciones más que sospechosas teniendo en cuenta que nunca nadie jamás le ha acusado de creer en tres Dioses.
- La descripción de las propiedades y limitaciones del Hijo, y el énfasis en que el Hijo fue "nacido", si bien son bíblicas en el contexto apropiado, son típicos de los modalistas. Los conceptos son machacados por ellos para marcar la diferencia entre la humanidad del Hijo y la divinidad del Padre viviendo dentro de él. Recordemos que los unicitarios enseñan que Jesucristo es el Padre envuelto en carne o humanidad. Los conceptos destacados por Jakes son también usados para enseñar que el Hijo tuvo un comienzo, según la herejía modalista. Jakes en ningún momento menciona la eternidad del Hijo.
Jakes continúa diciendo en el mismo artículo:
- "El lenguaje en la declaración doctrinal de nuestro ministerio en referencia a la Trinidad de la Deidad como "manifestaciones" no deriva del modalismo. El mismo apóstol Pablo usó este término para referirse a la Deidad en 1 Timoteo 3:16, 1 Corintios 12:7, y 1 Juan 3:5".
El señor T.D. Jakes es muy sagaz y huidizo, pero los pasajes que usa no tienen nada que ver con la naturaleza de Dios en su existencia antes de la encarnación de Cristo. Las palabras "manifestado-manifestación" en 1 Corintios 3:16 y 1 Juan 3:5 (apareció) se aplican a la encarnación, i.e., a Dios hecho carne en la persona de Jesucristo en determinado punto de la historia, no en la eternidad. 1 Corintios 12:7 es una referencia a los dones del Espíritu, no a la naturaleza de Dios. El problema de Jakes es que nunca hace una distinción entre el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre. Jakes se limita a distinguir entre el Hijo y el Padre, nada más. La implicación es que el Hijo es la humanidad solamente. Esto es modalismo.
¿Ha notado usted, amigo lector, que T.D. Jakes en ningún momento usa la palabra "persona" para describir su concepto de Dios. Sabelio, el hereje del 3er. siglo también lo evitaba. En lugar de ello usaba "manifestaciones".
Todo el palabrerío de Jakes se reduce, en el análisis final, a una negación más que velada de la doctrina de la Trinidad. Debido a que las figuras más prominentes del sector evangélico en los EEUU son una mezcla de pigmeos doctrinales, profesionales asalariados que han perdido el interés en la doctrina de la Trinidad, y promotores de doctrinas aberrantes, T.D. Jakes puede continuar bailando un paso doble alrededor del sagrado tema de la Trinidad. Lo cierto es que este hombre debe ser condenado por sus enseñanzas. Es un falso maestro con todas las letras.
EL BAUTISMO DE JESÚS Y EL INEFABLE GIRO MODALISTA
Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia. (Mateo 3:16-17)
En este pasaje tenemos a Jesús en el agua, el Espíritu Santo descendiendo sobre El en forma de paloma, y la voz del Padre diciendo "Este es mi Hijo amado". Más allá de que el pasaje es básicamente narrativo, el cristianismo histórico siempre ha señalado que el contexto describe a tres personas presentes simultáneamente, lo que constituye un esbozo de la Trinidad.
Los unicitarios (o modalistas) pretenden explicar el pasaje diciendo que tanto la paloma como la voz proveniente del cielo, fueron sólo manifestaciones del mismo Dios o del mismo Jesús por medio de su omnipresencia. David K. Bernard, de la UPC (Iglesia Pentecostal Unida) dice que para un Dios omnipresente no es ninguna dificultad manifestarse de varias maneras al mismo tiempo. La voz fue para beneficio del pueblo, indicando que Jesús comenzaba su ministerio, y la paloma, una señal para Juan el Bautista indicándole quién era el Mesías y simbolizando una especie de unción sobre Jesucristo [1].
Todo esto suena muy bonito, pero en realidad se parece a una película con efectos especiales, tanto visuales como de sonido, y en definitiva presenta a un Dios que recurre a métodos engañosos para comunicarse con su pueblo.
Habiendo dicho esto, corresponde especificar que los trinitarios no pensamos que Mateo 3:16-17 prueba por sí solo la doctrina de la Trinidad. Al contrario de los unicitarios, ningún trinitario basa sus creencias en la Trinidad en un solo versículo, sino más bien en la evidencia acumulativa presentada en toda la Escritura. Cuando Mateo 3:16-17 es considerado individualmente, presenta a tres personas actuando simultáneamente, y si bien por sí solo no constituye una prueba de la Trinidad, considerado en conjunto con otros pasajes, sí podemos decir tranquilamente que apoya la Trinidad. Al estudiar la Biblia sistemáticamente, podemos afirmar que las tres personas mencionadas en este pasaje - Padre, Hijo y Espíritu - son Dios, por lo tanto, existe una pluralidad en la esencia de la Deidad.
Como nota adicional, aprovechamos para lamentarnos junto con los amigos unicitarios: ¡Qué magnífica oportunidad dejó pasar el Espíritu Santo (o el Padre según los unicitarios) para enseñar la doctrina de la unicidad de Dios! La voz del cielo bien pudo haber dicho: "Ese que ustedes ven en el agua es mi Hijo amado, que en realidad soy yo manifestado en carne, y la paloma representa al Espíritu Santo, que también soy yo (el Padre)". Dios podría haber hecho lo mismo en los otros pasajes donde habló desde los cielos (Mt. 17:5; Jn. 12:30), lo que hubiera evitado todo el problema que tenemos hoy entre unicitarios y trinitarios. Pero parece que Dios prefirió inspirar a Mateo para que estructurara el pasaje con un claro sesgo trinitario. ¿Nos dice algo eso?.
EL ABUSO UNICITARIO DEL ANTIGUO TESTAMENTO 1
Un análisis basado en "La Unicidad de Dios" de David K. Bernard
De acuerdo con una de las normas hermenéuticas básicas, los eruditos cristianos conservadores estudian el AT a la luz del NT, nunca a la inversa. En otras palabras, el Nuevo Testamento es el que arroja luz sobre la revelación de Dios en el Antiguo Testamento.
Para los antitrinitarios en general, y los modalistas en particular, es tarea fundamental el reinterpretar los pasajes del AT que los trinitarios usamos para demostrar indicios de la pluralidad en la esencia de un único Dios. David K. Bernard, en el capítulo 7 de su libro La Unicidad de Dios, titulado "Explicaciones del Antiguo Testamento", pretende precisamente hacer tal cosa. [1]
Intentando primero que todo atenuar el peso de la prueba evidencial de que la palabra Elohim (la más común nomenclatura de Dios en el AT) es plural, Bernard expresa:
- La mayoría de los eruditos concuerdan en que el uso de la palabra plural Elohim indica la grandeza de Dios o sus múltiples atributos; no implica una pluralidad de personas o personalidades. Los judíos ciertamente no interpretan la forma plural como algo que compromete su fuerte monoteísmo. Flanders y Cresson explican que el uso plural en el hebreo tiene cierta función fuera de indicar pluralidad: "La forma de la palabra, Elohim, es plural. Los hebreos pluralizaban los sustantivos para expresar grandeza o majestad."
En el anterior párrafo, Bernard comienza con una afirmación totalmente insustanciada al decir que la mayoría de los eruditos niegan que Elohim implique pluralidad de personas. Para que su aserción tuviera alguna credibilidad, Bernard debió haber indicado que los eruditos a los que hace referencia son mayormente liberales. Conviene aclarar que algunos eruditos conservadores también han sucumbido ante el argumento del pluralis mayestaticus, fabricado por el teólogo judío Gesenius en el siglo 19.
¡Por supuesto que "los judíos no interpretan la forma plural como algo que compromete su fuerte monoteísmo"! Los judíos hasta llegaron a modificar palabras del AT, tal como el reemplazar "ecad" (el Uno pluralizado, unificado o compuesto) por "yachid" (el Uno numérico o absoluto) en Deuteronomio 6:4, poco tiempo después de la propagación del cristianismo. Es obvio que los judíos vieron algo en el uso de la palabra ecad que los unicitarios no quieren ver. Felizmente, los manuscritos conservados del AT exponen la artimaña de los judíos ortodoxos.
Bernard continúa diciendo:
- La misma Biblia revela que la única manera de entender la forma plural de Elohim es que expresa la majestad de Dios y no una pluralidad en la Deidad, por su énfasis en dos puntos. Su insistencia en un solo Dios y por su uso de Elohim en situaciones que definitivamente representan solo una persona o personalidad. Por ejemplo, Elohim identifica la manifestación singular de Dios en forma humana a Jacob (Génesis 32:30). Los israelitas usaron la palabra elohim para el becerro de oro que hicieron en el desierto (Exodo 32:1, 4, 8, 23, 31), pero sin embargo el relato bíblico indica claramente que había solo un becerro de oro (Exodo 32:4, 5, 8, 19-20, 24, 35).
Estas palabras de Bernard para nada refutan la doctrina de la Trinidad. Que la Biblia enseña la existencia de un solo Dios es también un pilar trinitario. Presupuesta en su declaración y escondida en su razonamiento subsiste la idea de que los trinitarios creemos en 3 dioses. Esto, por supuesto, se conoce como la falacia del monigote de paja. Por otra parte, el uso de Elohim en situaciones donde se habla de una sola persona, tampoco refuta la idea de una pluralidad en la Deidad. En el caso de Jacob diciendo que vio a Dios "cara a cara" (Génesis 32:30) luego de su encuentro con un ser individual, no representa ningún problema para el trinitario ya que en la Biblia el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, los tres son llamados Dios (Elohim). El caso del becerro de oro en el desierto es fácilmente desechable ya que Dios no está en el contexto del pasaje. Bernard comete aquí la falacia de la falsa analogía. Los demás ejemplos bíblicos que a continuación da Bernard, y que por razones de espacio no publicaremos, caen dentro de las dos categorías anteriores por lo cual no los tocaremos.
Veamos ahora otro argumento de Bernard para rebatir el uso de nombres, pronombres y verbos en el plural. Este es su comentario en Génesis 1:26:
"Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen."
¿Por qué usa este versículo un pronombre plural para Dios? Antes de contestar, notemos que la Biblia usa pronombres singulares para Dios cientos de veces. El próximo versículo usa el sentido singular para demostrar cómo Dios cumplió el versículo 26: "Y creó Dios al hombre a su imagen" (Génesis 1:27). Génesis 2:7 dice, "Entonces Jehová Dios formó al hombre." Debemos entonces reconciliar la forma plural en 1:26 con la forma singular en 1:27 y 2:7. Debemos también mirar a la criatura imagen de Dios, que es el hombre. Prescindiendo de cómo identificamos los varios componentes que forman un hombre, un hombre definitivamente tiene una sola personalidad y voluntad. El es una sola persona en toda manera. Esto indica que el Creador a cuya imagen el hombre fue hecho es también un solo ser con una sola personalidad y voluntad.
Bernard intenta reconciliar aquí lo que él ve como una aparente contradicción, o sea, el hecho de que el AT "use pronombres singulares para Dios cientos de veces", pero al mismo tiempo en numerosas ocasiones utiliza plurales.
Los unicitarios son muy dados a citar una serie de versos donde Dios habla usando pronombres singulares. Ellos creen que con eso ya han refutado la doctrina de la Trinidad. No obstante, los trinitarios no tenemos ningún problema cuando encontramos palabras singulares aplicadas a Dios porque creemos que Dios es uno, hablando numéricamente. Esto parece ser ignorado por nuestros amigos unicitarios.
Un ejemplo de nombre singular para Dios lo encontramos en Números 23:19:
Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?
En este versículo, se le aplica a Dios un nombre singular, "El". ¿Nos preocupa esto a los trinitarios? ¡Claro que no! Desde que hay un solo Dios, esto no nos sorprende. Es perfectamente adecuado dentro de nuestra doctrina, que Dios hable en términos de "mí" y "yo".
Pero cuando se trata de nombres, pronombres, adjetivos y verbos plurales, es frustrante para el unicitario encontrarlos en el AT. La Biblia abunda en ejemplos. Desde que Dios es multipersonal, es natural que el AT contenga pasajes donde Dios habla en términos como "nosotros" y "nuestros". Nosotros sabemos que Dios es uno en un sentido y tres en otro. Esa es la doctrina de la Trinidad.
La doctrina de la Trinidad abarca tanto los plurales como los singulares. El pobre unicitario solo admite singulares, está preso es su propia concepción de Dios. No puede dejar que la Biblia hable por sí sola.
No es cierto lo que dicen acerca de que los judíos creían en un Dios unipersonal. Si los autores de la Biblia en realidad creían que Dios era solamente una persona, jamás hubieran usado en su gramática, nombres, pronombres, adjetivos y verbos en el plural. Pero eso es exactamente lo que hicieron.
¿Qué queda de los pasajes mencionados por los unicitarios? Desde el momento que usan nombres y modificadores singulares, es evidente que Dios está hablando como "uno". Es la Deidad la que está hablando.
¿Por qué los unicitarios no toman en cuenta los pasajes con plurales (en hebreo)? Bueno, ya todos sabemos. Porque cometen la falacia lógica de la evidencia selectiva o parcial, es decir, citan sólo la evidencia que les conviene e ignoran, o en su defecto distorsionan aquellas que contradicen su doctrina.
Ahora, ¿qué tan válido es el argumento de Bernard que dice que como el hombre fue creado a la imagen de Dios, y el hombre es una sola persona, se deduce que Dios también es una sola persona? El argumento es inválido. La palabras "imagen" (tselem) y "semejanza" (demut) en hebreo no demandan gramaticalmente una igualdad o réplica exacta del original. Son, además, limitadas por la Palabra de Dios misma. Los humanos no poseemos los atributos "omni" de Dios, ni su naturaleza divina, ni tenemos la habilidad de crear. Nuestra imagen y semejanza con Dios es de carácter moral, intelectual y espiritual. El razonamiento de Bernard es tan ilógico como el de aquellos que estiran la interpretación hasta decir que Dios tiene un cuerpo igual a nosotros. La doctrina de la Trinidad no contradice en nada el que el hombre haya sido creado a imagen de Dios, ya que enseña que Dios es un ser, y los hombres también somos seres, independientemente de que Dios sea un Ser multipersonal. La correspondencia entre Dios y el hombre sigue estando en pie, en virtud de la Trinidad Económica la cual describe a Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, actuando juntos en armonía total como uno solo. También se le conoce como la Trinidad Inmanente.
Luego de todo el razonamiento previo, Bernard pasa a ofrecer otras explicaciones factibles, según él, para justificar el uso de plurales en Génesis 1:26. Que Dios hable aquí usando pronombres plurales, es, para Bernard:
1) una referencia a los ángeles. 2) una descripción de Dios tomando consejo de su propia voluntad 3) una pluralidad majestuosa o literaria 4) un pronombre que simplemente concuerda con el sustantivo Elohim 5) una referencia profética a la futura manifestación del Hijo de Dios
Analicemos ahora la validez de estos reclamos.
1) ¿Es el plural de Génesis 1:26 una referencia a los ángeles?
Bernard escribe:
- Ya que Génesis 1:26 no puede significar dos o más personas en la deidad, ¿qué significa? Los judíos lo han interpretado tradicionalmente con el significado de que Dios habló con los ángeles en la creación. Esto no implica que los ángeles tomaron realmente parte en la creación, sino que Dios les informó acerca de sus planes y solicitó sus comentarios por cortesía y respeto. Por lo menos, en una ocasión más, Dios habló con los ángeles y solicitó sus opiniones al formular sus planes (1. Reyes 22:19-22). Y sabemos que los ángeles estaban presentes en la creación (Job 38:4-7).
El registro bíblico no da lugar para tal fábula de los judíos. El invento carece de base bíblica ya que los ángeles no tienen la misma capacidad creativa de Dios (hagamos). Tampoco hay indicación ninguna en la Biblia para afirmar que los ángeles puedan crear vida. La imagen y semejanza que se menciona en el verso es la misma para ambos, es la misma para Dios (nuestra imagen - nuestra semejanza) y para el interlocutor. Tampoco hay indicación de que los ángeles fueron creados a la imagen de Dios. Conclusión: Dios no está hablando con un ángel ni con un concilio de ángeles.
En vista de lo anterior, el resto del párrafo de Bernard es irrelevante, es decir, no apoya el argumento principal y no tiene conexión lógica con éste. Esta falacia se conoce con el nombre de non sequitur. Si bien esto entierra el argumento de Bernard, me permito agregar que la sola idea de que el incomparable Creador del universo consultó con los ángeles en la magna ocasión de la creación del hombre (o cualquier otra decisión) es un insulto a la soberanía y autoridad del Dios infinito. Es como si el hombre consultara con los insectos acerca de sus decisiones.
2) ¿Estaba Dios tomando consejo de su propia voluntad?
Bernard escribe:
- Otros comentaristas han sugerido que Génesis 1:26, simplemente describe a Dios tomando consejo de su propia voluntad. Efesios 1:11 apoya este punto de vista, diciendo que Dios obra todas las cosas "según el designio de su voluntad." Por analogía, esto es semejante a un hombre que dice "Vamos a ver" aun cuando está formulando sus planes a solas.
No existe en el texto ninguna indicación que apoye esta especulación descabellada. La narrativa es sencilla y directa. Moisés reporta las palabras de Dios ("Entonces dijo Dios") sin siquiera sugerir la teoría de que Dios estaba deliberando consigo mismo. La teoría se conoce como el "plural de deliberación", y presenta a Dios meditando y concentrando sus pensamientos en cuanto a la decisión de crear al hombre. El peso de la prueba recae sobre sus proponentes y me temo que no tienen el más mínimo apoyo bíblico. El texto bíblico se opone vehementemente a la teoría. Es cierto que otras partes de la Biblia describen a personas consultando o discurriendo con su naturaleza inmaterial, por ejemplo, el Salmo 42:5 y 43:6 leen: "¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí?" La diferencia consiste en que el salmista usa las palabras "oh alma mía", lo que hace obvio que está deliberando consigo mismo. Este no es el caso de Génesis 1:26. La evidencia reduce la teoría al nivel de un cuento para dormir a los niños.
Finalmente, ¿apoya Efesios 1:11 esta hipótesis irracional? Para nada. "Según el designio de su voluntad" simplemente significa que Dios hace todas las cosas de acuerdo con su propósito soberano, determinado e inalterable a los efectos de derramar bendiciones sobre aquellos que creen en Cristo. La idea de Dios consultando y cavilando consigo mismo no se encuentra en el texto.
3) ¿Acaso Génesis 1:26 se trata un plural majestuoso o literario?
Bernard escribe:
- Otros explican la pluralidad en este pasaje como una pluralidad majestuosa o literaria. Es decir, en la escritura u oración formal, el orador o el escritor frecuentemente se refiere a sí mismo en la forma plural, especialmente si el orador es de posición real. Se pueden citar ejemplos bíblicos de la forma plural para ilustrar esta costumbre. Por ejemplo, Daniel le dijo al Rey Nabucodonosor, "la interpretación de él diremos en presencia del rey" aunque solo Daniel procedió a darle la interpretación al rey (Daniel 2:36). El rey Artajerjes, en su correspondencia, alternó entre referirse a sí mismo en la forma singular y la forma plural. Una vez, él escribió, "La carta que nos enviasteis fue leída claramente delante de mí" (Esdras 4:18). En una carta a Esdras, Artajerjes dijo de sí mismo "mí" en un lugar (Esdras 7:13) pero "os hacemos" en otro lugar (7:24).
Bernard recurre aquí a una explicación contemporánea muy popular, la que ya ha sido plenamente refutada por académicos de renombre y aun por mi propio artículo, titulado "¿Plural Mayestático?". Por ahora valga decir que en apariencia, la idea parece estar basada en pruebas lingüísticas y análisis histórico. Los ejemplos usados por Bernard para apoyar esta posición merecen ser analizados uno por uno, y así procederemos.
a) Daniel 2:36
El rey Nabucodonosor ordenó matar a los adivinos de su corte porque éstos no le pudieron mostrar el sueño que el rey hubo olvidado ni la interpretación correspondiente. Daniel intercede ante el rey por más tiempo y acto seguido fue a su casa y exhortó a sus compañeros para que oraran a Dios por la revelación del sueño (Daniel 2:17-18). Una vez que Dios responde la oración, Daniel va delante del rey y en medio de su oratoria expresa: "Este es el sueño; también la interpretación de él diremos al rey". Los antitrinitarios dicen que esta es una prueba "infalible" de que el plural de majestad era típico entre los hebreos. Para afirmar esto no toman en cuenta que:
- Daniel probablemente está hablando en representación del grupo que él integraba junto con Ananías, Misael y Azarías (v.17).
- En el v.30, Daniel dice: "Y a mí me ha sido revelado este misterio". Si el plural fuera de uso común entre los hebreos, ¿por qué Daniel no lo usó en esta ocasión en medio del mismo discurso?
- El pasaje fue escrito en idioma arameo. Ningún lingüista que se precie formaría un argumento para apoyar una construcción gramatical en hebreo basado en un texto arameo.
- Daniel estaba muy lejos de ser un monarca hablando. Su estado en el imperio babilónico, si bien más adelante pasó a ser de preeminencia, en este momento no pasa de ser un prisionero con ciertos privilegios que, para colmo, estaba a punto de ser ejecutado. Es absurdo afirmar que Daniel estaba usando el plural de majestad.
El argumento de Bernard (prestado de otros) es más que raquítico.
b) Esdras 4:18
Este verso citado por Bernard como "prueba absoluta" del uso del plural majestuoso en la Biblia, lee así:
La carta que nos enviasteis fue leída claramente delante de mí.
Esdras 4:18 es el único ejemplo de construcción de un "plural de majestad" donde un rey está hablando. Corresponde mencionar que se trata de un texto en el idioma arameo, y como dijimos antes, ningún lingüista que se precie formaría un argumento para apoyar una construcción gramatical en hebreo basado en un texto arameo. Además, si el plural de majestad fuera una expresión idiomática común en el hebreo, corresponde preguntarse por qué el verso termina con el singular "delante de mí". Otro factor a tomar en cuenta es que el libro de Esdras fue escrito en 440 A.C., mientras que Génesis fue escrito unos mil años antes (recordemos que el verso en cuestión es Génesis 1:26). Aun si el ejemplo de Esdras fuera válido, no significa que el plural de majestad fuera usado un milenio antes por Moisés.
c) 2 Crónicas 18:5
A pesar de que Bernard no usa este ejemplo, conviene que el lector esté compenetrado con este argumento antitrinitario que se promueve como "prueba" por el plural de majestad. 2 Crónicas 5:18 dice:
Entonces el rey de Israel (Acab) reunió a cuatrocientos profetas, y les preguntó: ¿Iremos a la guerra contra Ramot de Galaad, o me estaré quieto?
¿Es éste un plural de majestad en boca de un monarca de Israel? ¡De ninguna manera! Los versos anteriores dicen:
Y dijo Acab rey de Istael a Josafat rey de Judá: ¿Quieres venir conmigo contra Ramot de Galaad? Y él respondió: Yo soy como tú, y mi pueblo como tu pueblo; iremos contigo a la guerra. Además dijo Josafat al rey de Israel: Te ruego que consultes hoy la palabra de Jehová (2 Crónicas 18:3-4).
A la luz del contexto, es indiscutible que el plural del verso 5 (iremos) no es un plural de majestad sino que es una referencia directa a ambos reyes, Acab y Josafat.
4) ¿Pronombres que simplemente concuerdan con el sustantivo Elohim?
Bernard escribe:
- El uso de la forma plural en Génesis 1:26, también puede ser semejante a la forma plural Elohim en que denota la grandeza y majestad de Dios o los múltiples atributos de Dios. En otras palabras, el pronombre plural concuerda con y se sustituye por el sustantivo plural Elohim.
Este es un argumento anémico por excelencia. Si fuera como Bernard dice, ¿por qué en cientos de otros pasajes cuando ‘Elohim" (plural) es usado, es seguido por pronombres y verbos en singular? Obviamente, el hecho de que en pasajes como Génesis 1:26 encontremos las formas plurales es indicativo de que estamos frente a algo mucho más allá de un recurso gramatical armonizado o concordante.
5) ¿Es Génesis 1:26 un pasaje profético?
Bernard escribe:
- Aun otra explicación, es que este pasaje describe la presciencia de Dios acerca de la futura llegada del Hijo, muy semejante a los pasajes proféticos de los Salmos. Debemos darnos cuenta de que Dios no vive en el tiempo. Sus planes le son reales, aunque están en lo que nos concierne a nosotros, en el futuro. El llama las cosas que no son como si fuesen (Romanos 4:17). Para El, un día es como mil años y mil años son como un día (2a Pedro 3:8). Su plan -el Verbo- existió desde el principio en la mente de Dios (Juan 1:1). En lo que concierne a Dios, el Cordero fue inmolado antes de la fundación del mundo (1. Pedro 1:19-20; Apocalipsis 13:8). No es sorprendente que Dios pudiera transcurrir visualmente los corredores del tiempo y dirigir una declaración profética al Hijo. Romanos 5:14 dice que Adán era una figura de Aquel que había de venir, es decir, Jesucristo. Cuando Dios creó a Adán, El ya había pensado de la Encarnación y creó a Adán con aquel pensamiento en mente.
La primera reacción de un apologista cristiano al leer un párrafo como el anterior, es preguntarse, ¿será necesario refutar tal desvarío? Pero cuando reflexionamos en la falta de preparación y habilidad de análisis crítico preponderante en nuestra cultura y aun en filas cristianas, concluimos que sí se debe refutar la idea de los modalistas. En el arsenal de argumentos de los unicitarios, éste es el más absurdo de todos. Si Génesis 1:26 es un pasaje mesiánico similar al de los Salmos, ¿por qué los judíos, que reconocen los pasajes de los Salmos como mesiánicos, no reconocen Génesis 1:26 como tal?
Los judíos ortodoxos sabían muy bien que el estilo literario de Génesis 1 es una narrativa histórica. Es por ello que jamás intentaron interpretar Génesis 1:26 en la descabellada forma que los unicitarios lo hacen. Por supuesto que para negar la unipluralidad de Dios salieron con otras interpretaciones y aun con diferentes traducciones, pero nunca trataron de decir que se trataba de una declaración de Dios hecha con el futuro Mesías en mente. De acuerdo con la tradición judía, los eruditos que trabajaron en la traducción Septuaginta del hebreo al griego unos dos siglos antes de Jesucristo, estaban muy molestos por los pronombres plurales de Génesis 1:26. Por ello es que se tomaron la libertad de cambiar "hagamos" por "haré" ("The Image of God in Man," D.J.A. Clines, Tyndale Bulletin (1968), p. 62, referring to J. Jervell, "Imago Dei... ," Gottingen (1960), p. 75).
De la misma forma, otros comentaristas durante la historia han adulterado el texto. El rabino Ibn Ezra de la Edad Media, a su vez, dijo que era absurdo el intentar cambiar la forma activa "hagamos" (na’a’she) por el pasivo "es hecho" (niphal). Estos comentaristas dijeron que la frase "a nuestra imagen y semejanza" no fue dicha por Dios, sino que fue agregada por Moisés a modo de posdata (Ibn Ezra's Commentary on the Pentateuch: Genesis (Bereshit), H. Norman Strickman and Arthur M. Silver, trans. (New York: Menorah Publishing Co., 1988), p. 43).
A la luz del registro, la evidencia histórica, contextual, literaria y exegética, la hipótesis de los unicitarios relacionada con la "presciencia de Dios acerca de la futura llegada del Hijo", pierde toda credibilidad. La interpretación de Bernard, vale mencionar, está basada en la deficiente doctrina de que el Hijo de Dios no pre-existió antes del pesebre, aberración ésta que trataremos en la segunda parte del análisis. Todo lo que se construye sobre una falsa base (la doctrina unicitaria del Hijo) es consecuentemente falso.
Más sobre el espejismo unicitario
David Bernard prosigue diciendo en su libro:
Otros Pronombres Plurales
En el Antiguo Testamento, hay unas cuantas veces cuando Dios usó pronombres plurales, por ejemplo, Génesis 3:22, 11:7, e Isaías 6:8. Una lectura de estos versículos de la Escritura demostrará que pueden fácilmente significar Dios y los ángeles (los tres versículos) o posiblemente Dios y los justos (Isaías 6:8). Cualquiera de las primeras cuatro explicaciones dadas para Génesis 1:26 podría explicar adecuadamente el uso plural en estos pasajes.
La verdad es que ninguna de las explicaciones dadas para Génesis 1:26 explica adecuadamente el uso de los plurales en estos pasajes, y lo hemos visto claramente en nuestra crítica anterior. Las cuatro son internamente incoherentes y no pasan de ser intentos desesperados de negar lo obvio, o sea, que el AT revela una pluralidad en Dios.
A su vez, convendría traer a un unicitario de habla hispana al tapete. Se trata de Julio César Clavijo, quien en su libro en línea Un Dios Falso Llamado Trinidad, escribe:
- Como pudimos apreciar, la "teología" trinitaria no puede ignorar que todo el Antiguo Testamento está lleno de declaraciones que hablan de Dios como uno. Además, son cientos los pasajes donde Dios se refiere a sí mismo utilizando el pronombre personal "yo" y el pronombre posesivo "mí". Sin embargo, esa "teología" se aferra como un naufrago a una tabla, de cuatro versículos en los cuales Dios usa expresiones en plural y cree que de esa forma ya han probado la trinidad. La consigna trinitaria es que si Dios habla en plural es porque él es multipersonal y por ende, que él es una trinidad. Así, el trinitario ha sido programado para que no pueda considerar ninguna otra posibilidad para estos plurales que nada tienen que ver con la trinidad. [2]
Los cuatro versículos a que se refiere Clavijo son Génesis 1:26; 3:22; 11:7 y Isaías 6:8. Clavijo intenta aquí crear el espejismo de que los trinitarios sólo tenemos en el AT cuatro elementos de prueba para apoyar nuestra doctrina. Aun si esto fuera cierto, el peso de estos versos es abrumante y constituye una pesadilla para los antitrinitarios.
Pero a estos pasajes se suman otros factores que obligan a los enemigos de la Trinidad a correr buscando refugio. Veamos ahora un desglose de éstos:
Nombres plurares para Dios
Elohim El nombre aparece 2570 veces en el AT. La vasta mayoría de veces se refiere a Dios. Aunque su forma es plural casi siempre se usa con referencia al único y verdadero Dios. Sabemos esto porque en esos casos es asociado uniformemente con verbos, pronombres y adjetivos en el singular. Por la razón de que Elohim es plural y es un término general que significa "dios", también se puede usar para describir falsos dioses. Ejemplo: "Yo soy Jehová tu Dios (Elohim), que te saqué de la tierra de Egipto ... No tendrás dioses (elohim) ajenos delante de mí". De acuerdo con las reglas gramaticales del hebreo, los traductores de nuestra Biblia vierten Elohim en singular (Dios) y lo hacen uniformemente en todo el AT. El hecho de que Elohim en hebreo es una forma plural causa un impacto desvastador en la teología de los antitrinitarios, del cual no se pueden recuperar. En cuatro ocasiones Elohim es usado con la primera persona del plural (nosotros): Génesis 1:26; 3:22; 11:7; Isaías 6:8. En consecuencia, Elohim comunica la unidad del único Dios, y al mismo tiempo permite la pluralidad de personas divinas en la Deidad. Este giro del lenguaje es exclusivo del Israel monoteísta y no se encuentra en ninguno de los lenguajes de las naciones politeístas circundantes (Jack B. Scott, s.v. "elohim," in Theological Wordbook of the Old Testament, 2 vols. (Chicago: Moody Press, 1980), 1:44).
Adonai Este término significa "Soberano" o "Señor" y enfatiza el señorío de Dios. Adonai es el plural de Adon. Al igual que Elohim, Adonai es una forma plural que siempre se refiere a Dios y aparece 439 veces en el AT, y reitero, se usa solamente en referencia a Dios (ver Vine’s Expository Dictionary of Bibical Words, Thomas Nelson).
La evidencia anterior es suficiente para poner al antitrinitario en cama con una bolsa de hielo en la cabeza y un termómetro en la boca, pero aun hay más.
Verbos en forma plural usados en referencia a Dios
El uso de verbos plurales aplicados a Dios es significativo por demás. En el texto hebreo la palabra asah (gah-sah’), o Creador, se encuentra en la forma plural en varias referencias a Dios. Notemos la correcta traducción de Isaías 54:5 según el texto hebreo:
Porque tus maridos son tus Creadores: Jehová de los ejércitos (el Padre) es su nombre; y tu Redentor el Santo de Israel (el Hijo) el Dios de toda la tierra será llamado.
- Una expresión similar la encontramos en el Salmo 149:2: "Alégrese Israel en sus Hacedores ... " (traducción hebrea)
- Igualmente, Eclesiastés 12:1 lee en el hebreo: "Acuérdate de tus Creadores en los días de tu juventud... "
- Job 35:10 dice en hebreo: "¿Donde está Dios (Elohim, plural) mis Hacedores (plural de asah)".
- Génesis 20:13: "Dios (Elohim, plural) me hizo salir errante (hitau, plural de taau) de la casa de mi padre".
- Génesis 35:7: "Y edificó allí un altar, y llamó el lugar El-betel, porque allí le había aparecido (forma plural de gla) Dios (Elohim, plural), cuando huía de su hermano".
- Salmo 58:11: "Ciertamente hay Dios (Elohim, plural) que juzga (forma plural de shaphat) en la tierra".
Adjetivos plurales que describen a Dios
- Josué 24:19: "No podréis servir a Jehová, porque él es Dios (Elohim, plural) santo (forma plural de qadosh)".
- Proverbios 9:10: "El conocimiento del Santísimo (forma plural de qadosh) es la inteligencia".
- Proverbios 30:3: "Ni conozco la ciencia del Santo (plural de qadosh)".
Conclusión
Los elementos de prueba para demostrar que "Hagamos al hombre a nuestra imagen" (Génesis 1:26) es una referencia a la Trinidad son irrefutables. Los nombres y los pronombres plurales aplicados a Dios como ELOHIM, ADONAI, NUESTRA, NOSOTROS, y los verbos y adjetivos plurales que hemos detallado, muestran la silueta de la Trinidad dibujada tenuemente en el Antiguo Testamento, doctrina que luego fue revelada claramente en el Nuevo Testamento.
Todas las referencias al Creador existiendo como una pluralidad de personas en el AT armonizan perfectamente con la enseñanza del NT. El apóstol Juan escribió de Jesucristo: "Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho" (Juan 1:3). Apocalipsis contiene las palabras de Jesucristo dando testimonio de su obra creativa:
He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el comenzador [Gr. Arche, el originador o causa; incorrectamente traducido "el principio" en la mayoría de las versiones bíblicas] de la creación de Dios (Ap. 3:14)
Las Escrituras dicen que fue Jesucristo, como el Verbo de Dios, quien dijo "Sea la luz". Fue él que formó al hombre del polvo de la tierra, y el que creó "todas las cosas". El estaba con Dios desde el principio:
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios (Juan 1:1).
La Hebrew/ Greek Key Study Bible enuncia que el verbo griego en, traducido "era" en la segunda frase del verso, mejor traducido debió leer "ya estaba", y ofrece la siguiente paráfrasis para reflejar el verdadero significado en el texto griego:
Antes de que hubiera cualquier principio, el Verbo ya estaba... " (Zodhiates, Spiro, p.1315)
Aun traducido en su forma más común, una lectura normal del verso nos revela que las palabras de Juan indican claramente que Cristo existió antes de la creación del mundo. La eterna existencia de Cristo es repetida en el verso 2: "Este era (ya estaba) en el principio con Dios".
Cuando Juan escribió que el Verbo era con Dios, usó la preposición griega pros, que significa "hacia, cara a cara", e indica movimiento en dirección hacia algo o alguien (Bullinger, The Companion Bible, Appendix 104, XV, 3). El uso de pros demuestra más allá de toda duda que el Verbo no estaba en Dios, no era posesión de Dios, ni una idea, plan ni proyecto, sino que coexistía como alguien distinto. Para afirmar más esto, Juan vuelve a usar pros también en el verso 2.
Las palabras del apóstol Juan destruyen todo argumento contra la existencia eterna de Jesucristo y verifican la pluralidad de Dios revelada en el AT. Aquellos que proclaman que Jesucristo no existió eternamente como Theos y con Theos, son ciegos respecto a las palabras directas de la Biblia.
Los unicitarios se dan la mano con los judíos que alteraron la Palabra de Dios, cambiando el nombre original de Dios en pasajes clave donde la pluralidad de Dios era revelada. Se les hizo fácil desdibujar los pasajes que describían la existencia de dos Jehová. Gracias a Dios los manuscritos antiguos fueron preservados para desenmascarar la treta. Los unicitarios no cambiaron el texto de la Biblia, pero sí interpretan esos pasajes en forma absurda. Sus débiles argumentos serán refutados en la siguiente parte.